Al nuevo terruño, rico en nutrientes y con una tierra fértil, rebozante de vida, le encantaría recibir una pequeña semilla, una plántula, un arbusto o un árbol frutal que contribuya al proyecto del bosque comestible, para cuidar su tronco, esparcir sus semillas y cosechar sus frutos en el futuro.
Si quieren aportar cualquier planta, hemos dispuesto un transporte en el Vivero Restaurante Portales del Tayrona que queda en camino a Taironka y a las 3 pm saldrá en dirección a El paraíso para que todos podamos participar en la siembra y en el cultivo.
El Vivero queda en el Km 20 Entrada Pueblito - Calabazo
www.portalesdeltayrona.comSi tienen alguna pregunta, no duden en ponerse en
."Ese mundo vegetal que vemos tan tranquilo, tan resignado, en que todo parece aceptación, silencio, obediencia, recogimiento, es por el contrario aquél en que la rebelión contra el destino es la más vehemente y la más obstinada. El órgano esencial, el órgano nutricio de la planta, su raíz, la sujeta indisolublemente al suelo. Si es difícil descrubrir, entre las grandes leyes que nos agobian, la que más pesa sobre nuestros hombros, respecto a la planta no hay duda: es la que la condena a la inmovilidad desde que nace hasta que muere.
Así es que sabe mejor que nosotros, que dispersamos nuestros esfuerzos, contra qué rebelarse ante todo. Y la energía de su idea fija, que sube de las tinieblas de sus raíces para organizarce y manifestarse en la luz de su flor, es un espectáculo incomparable. Tiende toda entera a un mismo fin: escapar por arriba a la fatalidad de abajo; eludir, quebrantar la pesada y sombría ley, libertarse, romper la estrecha esfera, inventar o invocar alas, evadirse lo más lejos posible, vencer el espacio en el que el destino la encierra, acercarse a otro reino, penetrar en un mundo moviente y animado.
¿No es tan soreprendente que lo consiga, como si nosotros lográsemos vivir fuera del tiempo que otro destino nos señala, o introducirnos en un universo eximido de las leyes más pesadas de la materia? Veremos que la flor da al hombre un prodigioso ejemplo de insumisión, de valor, de perseverancia y de ingeniosidad. Si hubiésemos desplegado en levantar diversas necesidades que nos abruman, por ejemplo las del dolor, de la vejez y de la muerte, la mitad de la energía que ha desplegado tal o cual pequeña flor de nuestros jardines, es de creer que nuestra suerte sería muy diferente de lo que es."